Moda
La industria de la moda ha experimentado un crecimiento extraordinario y se espera que su tamaño actual de 1,3 billones de dólares siga creciendo.
Al mismo tiempo, las empresas de moda se enfrentan a importantes riesgos normativos y de reputación, siendo el último ejemplo la Ley de Sostenibilidad y Responsabilidad Social de la Moda de Nueva York*.
Para beneficiar a todas las partes interesadas de la cadena de suministro, proteger y mejorar la reputación de la empresa y reducir los riesgos financieros, las empresas deben abandonar el modelo lineal y adoptar un modelo de economía circular. Nuestros procesos de consultoría apoyan y ayudan a progresar en ese viaje dividiendo cada tarea en pasos que se secuencian y se llevan a cabo, para alejarse de los procesos de "tomar-hacer-usar-desechar". Reconocemos que el viaje del cambio transformacional comienza y se lleva a cabo mediante pasos individuales
NUESTROS AVANCES EN MATERIA DE CONSULTORÍA
Evaluación
Nuestro compromiso es, en primer lugar, identificar las métricas de sostenibilidad relevantes y encontrar las mediciones de referencia para su empresa, y conseguir que las partes interesadas participen desde el principio para garantizar que se escuche la voz de todos.
Formulación
A continuación, nos alineamos con sus objetivos y con lo que significa el éxito, y le ayudamos a formular una estrategia de sostenibilidad que incluya la fijación de objetivos, metas y KPI para los plazos acordados. La estrategia se centrará en sus valores de sostenibilidad y tendrá en cuenta sus recursos y presupuestos.
Aplicación
Después, le ayudaremos a usted y a su equipo a inculcar la sostenibilidad en todos los aspectos de su empresa, desde la implicación de los empleados, los clientes y la cadena de suministro hasta las campañas de sostenibilidad, el marketing y las comunicaciones. Estaremos allí para apoyarle en cada paso de su viaje hacia la sostenibilidad.
*La Ley de Sostenibilidad de la Moda y Responsabilidad Social exigiría a todas las empresas de moda que hagan negocios (vendan sus productos) en Nueva York y generen más de 100 millones de dólares de ingresos que mapeen al menos el 50% de sus cadenas de suministro y revelen impactos como las emisiones de gases de efecto invernadero, la huella hídrica y el uso de productos químicos. El proyecto de ley no especifica qué 50%, pero pide a las marcas que se centren en las áreas con mayores riesgos sociales y medioambientales. Las marcas tendrían que informar de los volúmenes totales de materiales que producen, una medida destacada que pondría de manifiesto el impacto agregado del sector que suele quedar oculto; la mayoría de las marcas destacan la reducción del impacto de los materiales individuales mientras siguen aumentando su producción y su huella total junto con ella. Las marcas tendrían que reducir su impacto, entre otras cosas, estableciendo y cumpliendo objetivos científicos para sus emisiones de gases de efecto invernadero.